viernes, 14 de octubre de 2011

Panleucopenia Felina...o enteritis infecciosa...otra de gatitos.

CAUSA: La panleucopenia felina o enteritis infeccioso, está provocada por un parvovirus muy resistente en el entorno, distinto del parvovirus canino. Los gatos jóvenes sin vacunar son los más propensos a infectarse. El virus se multiplica en el tubo digestivo y en la médula ósea, lo que explica los síntomas. Es un virus sumamente contagioso que se excreta con las heces y cualquier líquido corporal. Es muy resistente en el entorno, donde puede . La infección puede originarse por contacto directo con las heces de un gato infectado, o por contagio indirecto a partir de un entorno u objeto contaminados, como la cama del animal, los platos de comida o incluso un cuidador de un gato infectado. La infección se produce cuando se ingiere el virus.
SINTOMAS: Provoca síntomas digestivos (vómitos y diarrea, que a menudo es sanguinolenta), fiebre y rechazo de la comida; el animal aparece además extremadamente apático y postrado. Como resultado de estos síntomas los gatos pueden sufrir rápidamente deshidratación y anemia. A menudo el número de glóbulos blancos se reduce mucho.
Los gatitos sin vacunar son especialmente vulnerables, y en ellos la enfermedad puede ser mortal con gran rapidez.
Si una gata se infecta durante la gestación, el virus puede provocar daños en el sistema nervioso central (hipoplasia del cerebelo) de los gatitos. Si los gatitos sobreviven hasta el final de la gestación, presentan al nacer importantes problemas de equilibrio.
DIAGNÓSTICO: Los síntomas de diarrea hemorrágica y/o vómitos hacen sospechar rápidamente que se trata de una panleucopenia felina. Se puede confirmar el diagnóstico mediante un análisis fecal, que permitirá detectar la presencia del virus en las heces, o bien mediante el análisis comparativo de dos muestras de sangre extraídas con unas semanas de diferencia, cuyo resultado permitirá saber si el animal ha estado expuesto al virus.
TRATAMINETO: El tratamiento está dirigido a intentar controlar los síntomas. Tiene que ser agresivo y empezar cuanto antes. Suele ser necesario hospitalizar a los animales. Se usan antibióticos para controlar posibles infecciones secundarias. Se administran líquidos para tratar la deshidratación, y se puede hacer una transfusión de sangre u otros hemoderivados para tratar la anemia y el número reducido de glóbulos blancos. También se pueden dar fármacos para detener los vómitos.
Los animales infectados se tienen que aislar de los otros gatos. Además, se deben aplicar regímenes higiénicos estrictos con desinfectantes eficaces, para evitar la contaminación del entorno y la ropa y las manos de las personas en contacto con los animales enfermos.
PREVENCIÓN: La vacunación es muy eficaz para prevenir la infección y la enfermedad. Los gatitos se tienen que vacunar cuando tienen pocas semanas. Siempre se debe tener cuidado de no administrar una vacuna viva a las gatas durante la gestación, ya que ello conlleva el riesgo de provocar una hipoplasia cerebelosa similar a la que causaría una infección natural.


jueves, 13 de octubre de 2011

Otra enfermedad de los mininos!...Rinotraqueitis.


La rinotraqueítis felina es una enfermedad corriente en los gatos. Es una enfermedad respiratoria muy contagiosa que a veces ocasiona la muerte y otras secuelas permanentes. La mayor parte de los casos están provocados por uno de los dos virus de la rinotraqueítis felina o por ambos: el herpesvirus felino y el calicivirus felino.

CAUSASesta enfermedad se caracteriza por síntomas respiratorios acompañados de lagrimeo y/o abundante mucosidad nasal.
Los dos principales responsables son el herpesvirus felino y el calicivirus felino. Ambos están extendidos por todo el mundo y afectan a todos los miembros de la familia felina. Las distintas cepas del FCV presentan grandes diferencias en cuanto a su capacidad para causar la enfermedad, la gravedad del cuadro que provocan y los síntomas que generan. Recientemente se han descubierto algunas cepas muy virulentas del FCV que provocan afección sistémica y pueden causar la muerte. 
Los virus de la rinotraqueítis felina se propagan con gran facilidad a través de las diminutas gotitas que el gato disemina al estornudar, así como a través de las lágrimas y la mucosidad de la nariz. Las partículas infecciosas pueden provenir directamente del gato infectado, de la ropa de una persona o de cualquier otro objeto en el que el gato haya frotado su cara. La mayoría de los gatos que sobreviven a la enfermedad se convierten en portadores y propagan el virus aunque ya no muestren síntomas y, por tanto, actúan como un foco de infección para otros gatos. El FCV se excreta continuamente pero durante un tiempo relativamente breve después de la recuperación, sin embrago, la excreción del FHV es intermitente y está vinculada a los períodos de estrés, quedando el gato como portador de por vida.
Aunque los desinfectantes eliminan con eficacia los virus, estos pueden permanecer activos en las secreciones corporales hasta una semana. Ambos se propagan con gran rapidez en las colonias de gatos, y son muy temidos en las residencias felinas y en los refugios porque pueden ser muy difíciles de erradicar.
SINTOMAS:
Enfermedad Clásica: Los gatitos suelen ser los más afectados. La mayoría de los casos comienzan con estornudos, le sigue la pérdida del apetito
  • Apatía
  • Lagrimeo y mucosidad nasal
  • Úlceras bucales (especialmente en el caso del FCV)
  • Goteo de orina al acabar de orinar
y si se produce una infección bacteriana secundaria:

  • Mucosidad abundante, espesa y opaca que puede taponar la nariz y formar una costra
  • Otros síntomas respiratorios
Desenlace: La mayoría de los gatos se restablecen bastante bien, siempre que reciban el tratamiento adecuado. Muchos, sin embargo, sufrirán algunas secuelas permanentes.
La obstrucción permanente de los senos nasales y la secreción nasal excesiva son frecuentes, al igual que las infecciones crónicas de los ojos. Los gatos portadores pueden volver a sufrir de manera intermitente síntomas leves.

DIAGNÓSTICO Diagnóstico clínico y laboratorio
§         La rinotraqueítis felina clásica se diagnostica mediante las sospecha clínica derivada de los síntomas clínicos y la anamnesis.
Pruebas diagnósticasDiversas pruebas de laboratorio realizadas con los líquidos corporales (lágrimas, saliva y sangre) permiten detectar los virus.

TRATAMIENTO:
Hasta hoy no existe ningún tratamiento farmacológico disponible eficaz para combatir estos virus, sin embargo, el tratamiento que se adminitra va dirigido a ayudar a mantener en lo posible el estado general del animal (tratamiento de apoyo) y a eliminar las posibles infecciones secundarias causadas por bacterias.
§         La antibióticoterapia es para controlar las posibles infecciones bacterianas secundarias.
§         Si hay deshidratación habrá que instaurar fluidoterapia. También es importante determinar medicación para controlar los síntomas, como las secreciones nasales, la acumulación de líquido en los pulmones y la obstrucción de los senos nasales.
§         El manejo y cuidados generales son fundamentales para conseguir una recuperación satisfactoria. Se deb limpiar todas las secreciones, los orificios nasales no deben quedar obstruidos y los párpados deben permanecer abiertos. La boca debe mantenerse tan limpia como sea posible.
§         Intente que los gatos con úlceras en la boca coman una dieta especial (por su textura y contenido).
§         Antiinflamatorios.
Los gatos infectados y los que hayan estado en contacto con ellos han de permanecer aislados de otros gatos sensibles, y es necesario adoptar medidas de higiene (cambio de ropa de las personas en contacto con los animales infectados; uso de desinfectantes) para evitar la propagación de la infección.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Leucemia Felina...el terror de los gatos!


El virus de la leucemia felina (VLFe, FeLV en inglés) es un retrovirus que infecta gatos. FeLV puede ser transmitido entre gatos infectados por la transferencia de saliva o secreciones nasales. Si no es derrotado por el sistema inmune del animal, el virus puede ser mortal. La enfermedad causada por este virus es una forma de cáncer de las células sanguíneas llamadas linfocitos (una leucemia).

Los signos y síntomas de infección con virus de la leucemia felina son bastante variados e incluyen pérdida de apetito, pelaje pobre, infecciones de la piel, la vejiga y el tracto respiratorio, enfermedades bucodentales, convulsiones, linfadenopatía (inflamación de los ganglios linfáticos), lesiones en la piel (que no cicatrizan), fatiga, fiebre, pérdida de peso, estomatitis, gingivitis, evasión de la caja de arena, pancitopenia (reducción de los elementos sanguíneos) aseo pobre, enfermedades bacterianas y virales recurrentes, anemia, diarrea, e ictericia (mucosas amarillas).
Transmisión: Los gatos infectados con FeLV pueden servir como fuentes de infección. La transmisión está relacionada con el subgrupo A.Los gatos pueden posiblemente transmitir el virus entre ellos a través la saliva y el contacto cercano, al morder a otro gato, a través de una caja de arena o un plato de comida usado por un gato infectado y de leche durante la lactancia. La transmisión puede también producirse de una madre gata infectada a sus gatitos, ya sea antes de nacer o mientras están siendo amamantados.
Inicialmente se creía que el virus FeLV podría sobrevivir sólo 2 horas en una ambiente seco y 48 horas en un ambiente húmedo (por ejemplo, la caja de arena, sin embargo, una nueva investigación publicada por los veterinarios de Cornell University (http://www.vet.cornell.edu/FHC/news/) estableció una relación entre el FeLV y el VIH (Virus que puede sobrevivir durante numerosas semanas y es estructuralmente similar al FeLV) lo que haría tener cuidado al asumir que la sobrevivencia del virus en el ambiente es tan corta .
Existe Abrumadora evidencia epidemiológicas que sugiere que FeLV no es transmisible ni a los humanos ni a los perros, dado que este virus es especie-espefícico.Así mosmo, hay un gran conocimiento de que los gatitos menores de 4 meses de edad son susceptibles a la infección, pero a los 8 meses son resistentes - por lo que es una buena idea mantener a los gatitos domésticos jóvenes en el interior, donde la exposición al virus es mínima o inexistente, hasta alrededor de los 8 meses de edad.
Manifestación de la enfermedad: El gato puede luchar contra la infección y volverse totalmente inmune, puede convertirse en un portador sano que nunca se enferma en sí pero que puede infectar a otros gatos, o un caso de nivel medio en el que el gato tiene un sistema inmune comprometido y morir entre los 6 y 36 meses.
Cuando existe el desarrollo de linfomas se considera la última etapa de la enfermedad. Aunque se cree que la proteína del virus tiene que estar presente para inducir linfomas en gatos, los nuevos datos muestran que un alto porcentaje de linfomas antígeno FeLV negativo contiene ADN FeLV, lo que indica un mecanismo "golpe y fuga" de desarrollo de tumores inducidos por el virus.
Prevención:  Aunque no existe una vacuna que ofrezca protección al 100% del virus, si hay vacunas disponibles en el mercado. Se han nombrado efectos secundarios como consecuencia de la vacunación, pero estos son cada día menores ya que se han ido mejorando los adyuvantes de las vacunas.
No existe un Tratamiento efectivo, pero se puede prolongar la vida del paciente con un cuidado de sostén mediante antibióticos, hidroterapia, vitaminas, inmunoestimulantes y una buena nutrición. El linfosarcoma que no se trata es mortal en 1 o 2 meses, pero la quimioterapia anticáncer, la radioterapia, pueden inducir a una mejoría y hasta remisión en algunos gatos.También se utiliza como tratamiento alternativo y de sostén la inmunoterapia, y terápias alternativas como flores de Bach.
 Comparación con VIF
El virus de la inmunodeficiencia felina y el FeLV están en la misma familia, y son a veces confundidos. Sin embargo, los virus se diferencian en muchos aspectos y aunque muchas de las enfermedades causadas por FeLV y FIV son similares, las formas específicas en las que son causadas también difieren. Además, mientras que el virus de la leucemia felina generalmente causa una enfermedad sintomática en un gato infectado, el gato infectado por FIV puede permanecer completamente asintomático toda su vida.