Si la placa no es retirada, se produce el sarro dental, por impregnación de sales minerales. Es muy común que los amos no observen esta etapa y se desarrolle la GINGIVITIS: inflamación de los tejidos gingivales marginales inducida por la placa bacteriana. No afecta al hueso alveolar ni al ligamento periodontal. Se observan encías enrojecidas, tumefactas (heladas) y que sangran fácilmente, hay presencia de placa dental y sarro, además de mal aliento (Halitosis).
Esta enfermedad es reversible con un tratamiento médico-veterinario adecuado, el éxito del tratamiento depende de la detección y atención precoz de la enfermedad. Si por el contrario, no nos damos cuenta de lo que ocurre dentro de la boca de nuestra mascota; se presentará PERIODONTITIS: enfermedad irrecuperable, en terminos del daño que provoca. Hay presencia de placa bacteriana, sarro sub-gingival, piorrea (pus), destrucción de la encía, del hueso alveolar y de la raíz, halitosis, ptialismo, movilidad de las piezas dentales, pérdida del apetito y caída de los dientes.
En este caso es imprescindible la atención profesional de un médico veterinario, quien generalmente efectuará una limpieza minuciosa de los dientes (destartrage) bajo anestecia, para retirar el sarro y pulir el esmalte. Esto debe acompañarse de un tratamiento antibacteriano (antibióticos), además de la educación del cliente, para que éste realice limpiezas dentales periódicas en la mascota, a fin de evitar recaídas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario